UNICEF publica una nueva recopilación de datos que revelen la magnitud de la violencia contra las adolescentes y las actitudes alarmantes que perpetúan esos abusos. La compilación incluye una selección de los datos globales durante el año, detallando la violencia, el impacto real que tiene en las adolescentes, su futuro y el de sus comunidades y países. Las estadísticas incluyen:
- Casi una cuarta parte de las niñas de 15 a 19 años en todo el mundo (aproximadamente 70 millones) reportan haber sido víctimas de alguna forma de violencia física desde los 15 años.
- Alrededor de 120 millones de niñas menores de 20 años en todo el mundo (alrededor de 1 de cada 10) han experimentado relaciones sexuales forzadas u otros actos sexuales forzados, y uno de cada 3 chicas adolescentes alguna vez casadas de 15 a 19 años (84 millones) han sido víctimas de violencia emocional, física y/o sexual, cometida por sus esposos o compañeros.
Los datos sugieren que en algunos países, siete de cada 10 niñas de 15 a 19 años que habían sido víctimas de abuso físico y / o sexual nunca había buscado ayuda: muchos dijeron que no pensaban que era maltrato o no lo vieron como un problema.
A nivel mundial, más de 700 millones de mujeres vivas hoy en día se casaron antes de cumplir los 18 años. Más de uno de cada tres (unos 250 millones) entró en la unión antes de los 15 años.
Los datos revelan percepciones perjudiciales sobre la aceptabilidad de la violencia, sobre todo entre las niñas. A nivel mundial casi la mitad de las niñas de 15 a 19 cree que es justificado que el hombre golpee a su esposa o pareja, en determinadas circunstancias, tales como negarse a tener relaciones sexuales, salir de la casa sin permiso, descuidando a los hijos o quemar la cena.
"Estas cifras hablan de un modo de pensar que tolera, perpetúa, e incluso justifica la violencia - y debe sonar una alarma en todo el mundo, en todas partes," dijo la Directora Ejecutiva Adjunta de UNICEF, Geeta Rao Gupta.
UNICEF apunta acciones específicas para prevenir la violencia contra las niñas. Ellos incluyen: mantener a las niñas en la escuela; proporcionándoles destrezas necesarias; apoyar a los padres, incluso con transferencias de efectivo para mitigar los riesgos para las niñas; el cambio de actitudes y normas a través de conversaciones con la comunidad; y el fortalecimiento de los sistemas y los servicios judiciales, penales y sociales.
"El problema es global, pero hay que encontrar soluciones en los ámbitos nacional, comunitario y familiar. Tenemos la responsabilidad de proteger, educar y capacitar a los adolescentes. Todos somos responsables de poner fin a la violencia contra las niñas", dijo Rao Gupta.
Fuente UNICEF: http://www.unicef.org/media/media_76221.html
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