Según el diario The Guardian, la ONU habría intentado ocultar un informe que denunciaba actos de pedofilia cometidos en República Centroafricana por militares franceses entre diciembre de 2013 y junio de 2014 en un campo de desplazados. Los testimonios de una decena de niños son juzgados creíbles. El presidente francés dice que será "implacable" si los soldados son hallados culpables (Hollande: "No merci over claims French soldiers abused children in CAR").
Un informe interno de Naciones Unidas divulgado por el diario The Guardian acusa a las tropas internacionales, y en particular a los militares franceses desplegados durante la operación Sangaris, de haber abusado sexualmente de menores en un campo de refugiados en República Centroafricana entre diciembre de 2013 y junio de 2014.
En ese período, los militares franceses intervinieron en Bangui, capital del país, para interponerse entre las milicias cristianas y musulmanas, cuya violencia llevó a miles de civiles a refugiarse en un campo de refugiados en los alrededores de un aeropuerto. Fue en ese campo donde en junio de 2014 soldados abusaron sexualmente de niños de la calle, según esta denuncia.
Las conclusiones de esta investigación fueron filtradas por Anders Kompass, un funcionario sueco de la ONU basado en Ginebra, a las autoridades francesas. El ministerio de Defensa de Francia confirmó la apertura de una investigación preliminar el año pasado, paralelamente a la de la ONU.
Ante la inercia de su jerarquía, Kompass habría filtrado el documento confidencial antes de que fuera presentado a los altos funcionarios del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos. Por esta filtración Kompass fue suspendido mientras es objeto de un sumario administrativo.
Mientras tanto, las conclusiones del informe fueron transmitidas a The Guardian por la ONG Aids Free World, que trabaja sobre violaciones y abusos sexuales cometidos en misiones de paz.
“El informe está constituido por una serie de seis entrevistas con niños que han sido en su mayoría violados por soldados franceses en República Centroafricana en un período de varios meses”, asegura Paula Donovan, directora de la ONG.
“Esas entrevistas, en varios casos, explican lo que los niños han vivido directamente, personalmente. En otros casos, los niños dicen que no les ocurrió a ellos, pero a sus amigos, y dan sus nombres. Dan por otro lado muchos detalles para contar los maltratos sufridos por sus amigos y cierta cantidad de detalles para identificar a los agresores, describiendo rasgos de éstos, lo que hace que sus relatos sean muy creíbles. Al parecer, los niños han identificado por su nombre y descripciones a 16 hombres. Si sumamos los relatos personas de los niños violados y los de sus amigos, llegamos a un total de 10 víctimas”, agregó.
Por su parte, el presidente francés François Hollande dijo este jueves que será "implacable" si se confirman las acusaciones de que soldados franceses violaron a niños en la República Centroafricana.
"Si algunos militares se comportaron mal, seré implacable", dijo en la ciudad de Brets, en el oeste de Francia.
"Desde que recibimos las primeras informaciones, el ministerio de Defensa y yo mismo pusimos en marcha una investigación y lo comunicamos a la justicia", aseveró.
Las conclusiones de esta investigación fueron filtradas por Anders Kompass, un funcionario sueco de la ONU basado en Ginebra, a las autoridades francesas. El ministerio de Defensa de Francia confirmó la apertura de una investigación preliminar el año pasado, paralelamente a la de la ONU.
Ante la inercia de su jerarquía, Kompass habría filtrado el documento confidencial antes de que fuera presentado a los altos funcionarios del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos. Por esta filtración Kompass fue suspendido mientras es objeto de un sumario administrativo.
Mientras tanto, las conclusiones del informe fueron transmitidas a The Guardian por la ONG Aids Free World, que trabaja sobre violaciones y abusos sexuales cometidos en misiones de paz.
“El informe está constituido por una serie de seis entrevistas con niños que han sido en su mayoría violados por soldados franceses en República Centroafricana en un período de varios meses”, asegura Paula Donovan, directora de la ONG.
“Esas entrevistas, en varios casos, explican lo que los niños han vivido directamente, personalmente. En otros casos, los niños dicen que no les ocurrió a ellos, pero a sus amigos, y dan sus nombres. Dan por otro lado muchos detalles para contar los maltratos sufridos por sus amigos y cierta cantidad de detalles para identificar a los agresores, describiendo rasgos de éstos, lo que hace que sus relatos sean muy creíbles. Al parecer, los niños han identificado por su nombre y descripciones a 16 hombres. Si sumamos los relatos personas de los niños violados y los de sus amigos, llegamos a un total de 10 víctimas”, agregó.
Por su parte, el presidente francés François Hollande dijo este jueves que será "implacable" si se confirman las acusaciones de que soldados franceses violaron a niños en la República Centroafricana.
"Si algunos militares se comportaron mal, seré implacable", dijo en la ciudad de Brets, en el oeste de Francia.
"Desde que recibimos las primeras informaciones, el ministerio de Defensa y yo mismo pusimos en marcha una investigación y lo comunicamos a la justicia", aseveró.
Militares Franceses acusados de abusos contra menores en África
La noticia cayó como una bomba para el ejército francés. La fiscalía de París investiga los testimonios de seis niños, entre 9 y 15 años, que dicen haber sido obligados por los soldados a tener relaciones sexuales con ellos a cambio de comida.
Los hechos habrían ocurrido entre diciembre de 2013 y julio de 2014, cuando las fuerzas francesas estaban en el país africano para poner fin a los enfrentamientos entre las milicias cristianas y musulmanas. Esta operación, llamada Sangaris, fue avalada por las Naciones Unidas, y en ella participaron alrededor de 2000 soldados franceses.
Si bien los hechos ya eran investigados por la ONU desde el 2014, la noticia había permanecida secreta hasta el pasado 29 de abril, cuando fue publicada por el diario británico The Guardian.
El informe fue transmitido a las autoridades francesas en julio de 2014 por un alto responsable de la ONU, el sueco Anders Kompass, sin respetar los procedimientos de la organización internacional, en reacción, según él, a la inercia de la organización. El 17 de abril fue suspendido y desde entonces es investigado por Naciones Unidas.
Algunas ONGs acusaron a la organización internacional de haber querido ocultar el asunto. Pero el portavoz del Alto Comisionado de la ONU, Rupert Colville, consideró la acusación como "ofensiva".
No es la primera vez que la ONU debe responder ante casos de abusos sexuales durante sus misiones de paz. El mismo escenario se repitió en la República Democrática del Congo, Kosovo y Bosnia.
De los catorce soldados mencionados en el informe, muy pocos fueron identificados y por el momento no han sido interrogados.
El escandálo provocó la reacción del presidente francés François Hollande.
El informe menciona otros casos de abusos sexuales en la República Centroafricana, esta vez cometidos por soldados de Chad y Guinea Ecuatorial.
Entrevistados: Paula Donovan de la ONG Aids-Free World; Christophe Boulierac, portavoz de UNICEF.
No hay comentarios:
Publicar un comentario