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El
97% de los niños migrantes en 2015 provenía de Honduras (27.4%),
Guatemala (49.6%) y El Salvador (20.5%). La mayoría de ellos eran
adolescentes de entre 12 y 17 años.
En
el mismo año hubo más de 11 mil eventos de repatriación de niñas, niños
y adolescentes migrantes mexicanos desde Estados Unidos. De ellos el
84% (9,841) viajaban sin la compañía de un adulto.
Los
niños y niñas migrantes no acompañados enfrentan graves peligros como
accidentes, la trata de personas, el posible reclutamiento por el crimen
organizado, el maltrato y la explotación, por lo que requieren
protección inmediata.
“Estos
niños y niñas tienen sueños, quieren estudiar y tener una vida plena, y
necesitan todo nuestro apoyo para que puedan reunirse con sus
familiares y superar la violencia que los ha llevado a huir de sus casas
y logren vivir la vida a la que tienen derecho, sin violencia, con
educación y oportunidades” dijo Isabel Crowley, Representante de UNICEF
en México.
Ante
esta realidad, el Fondo de las Naciones Unidas, UNICEF, en México
destacó la importancia que tiene la nueva Ley General de Derechos de
Niñas, Niños y Adolescentes aprobada en el país para avanzar hacia la
plena garantía de los derechos de la infancia migrante.
“Antes que migrantes, los niños y niñas son personas con derechos. Por esa razón desde UNICEF estamos acompañando a las autoridades para que todas las personas que trabajan con niños y niñas se especialicen en la protección de sus derechos, sepan cómo comunicarse con ellos, cómo hablarles sin ocasionarles más daño psicológico y que puedan gestionar cada caso para que prevalezca el interés superior del niño”, enfatizó Crowley.
Añadió
que “los derechos de los niños, niñas y adolescentes deben ser
respetados sin importar su nacionalidad, situación migratoria, raza,
etnia, sexo o religión.”
Los
niños, niñas y adolescentes que no cuentan con documentación migratoria
experimentan dificultades para acceder a la justicia, a los servicios
educativos, de salud y sociales básicos. Viven con el temor de ser
retornados a sus lugares de origen o de no volver a ver a sus familias,
por lo que con frecuencia no se atreven a solicitar ningún tipo de
ayuda.
“UNICEF
acompaña los esfuerzos nacionales para que el país cuente con
instituciones más sólidas en materia de derechos de infancia y eso
redunde en beneficio de los niños, niñas y adolescentes migrantes”, dijo
Crowley.
Por
ejemplo, recientemente se llevó a cabo un curso para el personal
consular de México en Estados Unidos, que les permita adquirir
herramientas para un mejor acercamiento a los niños y adolescentes
migrantes no acompañados. Además, UNICEF ha puesto a disposición de las
autoridades tecnología desarrollada por la organización para el registro
de niños a través de teléfonos celulares o tablets, desde cualquier
lugar, en tiempo real.
“Los
oficiales consulares son los primeros que tienen contacto con los niños
y niñas, después de una detención. Por ello tienen la función de
realizar una evaluación inicial en la que deben identificarse los
aspectos particulares de vulnerabilidad, así como las necesidades
especiales de protección que presentan niñas, niños y adolescentes
migrantes no acompañados”, explicó la Representante de UNICEF.
El curso es parte de las acciones comprendidas en el Protocolo de atención consular a niños, niñas y adolescentes migrantes no acompañados que el año pasado presentó la Secretaría de Relaciones Exteriores en coordinación con UNICEF.
Se
trata de una guía para el trabajo del personal consular de México en el
exterior que busca garantizar el derecho a la protección y asistencia
consular de niñas, niños y adolescentes migrantes no acompañados o
separados. Es un instrumento que busca ayudar a evitar la re
victimización o victimización secundaria a las niñas, niños y
adolescentes.
UNICEF,
juntos con otras agencias de la ONU como OIM y ACNUR trabaja con la
Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados en el desarrollo de un protocolo
para la detección de indicios de necesidades de protección
internacional, como asilo y protección complementaria.
Con
la Procuraduría Federal de Protección del Sistema Nacional DIF, se
hacen esfuerzos para fortalecer los procedimientos de atención de casos
de niñas, niños y adolescentes migrantes.
UNICEF
México reiteró su determinación de continuar aportando su experiencia
internacional para mejorar la vida de niños, niñas y adolescentes en
México y el mundo
Fuente UNICEF México: http://www.unicef.org/mexico/spanish/noticias_32372.htm
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