Hace unos dias la Corte Interamericana de Derechos Humanos volvió a condenar al Estado peruano. Sí , como siempre. Esta vez fue por el caso de la desaparición de 15 miembros de la comunidad campesina de Santa Bárbara, en Huancavelica.
El 4 de julio de 1991, miembros de la patrulla "Escorpio", al mando del teniente Bendezú Vargas, que había partido de la base militar de Lircay en ejecución del operativo "Apolonia" para capturar y/o destruir terrucos, allanaron e incendiaron las viviendas de Franciso Hilario Torres y Ramón Hilario Morán, en Rodeo Pampa, Santa Bárbara, oportunidad en la que detuvieron a 14 personas, entre ellas a las niñas Yesenia, Miriam y Edith Osnayo Hilario (6, 3 años y 8 meses de edad, respectivamente), Héctor y Raúl Hilario Guillén (6 años, y 8 meses), Wílmer Hilario Carhuapoma (3 años) y Álex Jorge Hilario (6 años). También a la señora Merccedes Carhuapoma, quien se encontraba en el sexto mes de embarazo.
"24
años después del crimen múltiple, sin haber hecho algo para sancionar
el horror que infligimos a niños y niñas, sólo acudimos a Corta Rica a
palabrear".
Artículo de Ronald Gamarra Herrera publicado en Hildebrandt en sus trece, el viernes 20 de noviembre de 2015.
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