En
América Latina, una tercera parte de los embarazos corresponde a
menores de 18 años, y casi un 20% de ellos a niñas menores de 15 años.
En estas edades, el embarazo suele ser producto de violencia sexual,
dado que las jóvenes están expuestas a condiciones de alta
vulnerabilidad.
Así se señala en un estudio, "Vivencias y relatos sobre el embarazo en adolescentes: Una aproximación a los factores culturales, sociales y económicos", realizado en seis países de la región por el Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF) y la organización Plan Internacional.
Entre los motivos por los que muchas adolescentes quedan embarazadas a tan corta edad, el estudio menciona la falta de información y de oportunidades, las expectativas sociales y la violencia sexual.
Enfatiza
también que las proyecciones recientes plantean que la tasa de
fecundidad adolescente en América Latina será la más alta del mundo, y
que se mantendrá estable durante el periodo 2020-2100.
Bernt Aasen, director regional de UNICEF para América Latina y el
Caribe, expresó preocupación por las altas tasas de embarazo adolescente
en la región, aunque reconoció que la mayoría de los países ha adoptado
planes y programas para prevenirlo y asegurar que las madres puedan
recibir atención médica adecuada y seguir sus estudios.
Además, señaló que "tan importante es el fortalecimiento de los sistemas penales para que los crímenes asociados a la violencia sexual no queden impunes como la mejora en las condiciones sociales de los hogares, el trabajo para empoderar a las adolescentes, el fortalecimiento de las capacidades de los sectores de salud y de educación, y la promoción de los derechos de las adolescentes".
Lea el documento en español, "Una aproximación a los factores culturales, sociales y emocionales a partir de un estudio en seis países de la región":
No hay comentarios:
Publicar un comentario