El Informe "Una promesa renovada", indica que los primeros 28 días de vida de un recién nacido son los más vulnerables, casi 2,8 millones bebés mueren cada año durante este período. Un millón de ellos ni siquiera viven para ver su segundo día de vida. Las principales conclusiones de este estudio son:
Alrededor de la mitad de todas las mujeres no reciben el mínimo número recomendado de cuatro visitas de atención prenatal durante su embarazo.
Un cuarto de todas las muertes neonatales en el mundo son causadas por complicaciones durante el parto. En 2012, 1 de cada 3 bebés (aproximadamente 44 millones) entraron en el mundo sin el apoyo médico adecuado.
La evidencia muestra que iniciar la lactancia durante la primera hora de vida reduce el riesgo de muerte neonatal en un 44 por ciento, sin embargo, menos de la mitad de todos los recién nacidos en todo el mundo reciben los beneficios de la lactancia materna inmediata.
La calidad en la atención es extremadamente deficiente incluso para las madres y los bebés que tienen contacto con el sistema sanitario. Un Análisis de UNICEF de 10 países de alta mortalidad indica que menos del 10 por ciento de los bebés que nacen por una partera calificada pasó a recibir los siete intervenciones postnatales requeridos, incluyendo la iniciación temprana de la lactancia materna.
Del mismo modo, menos del 10 por ciento de las madres que vieron a un trabajador de la salud durante el embarazo recibió un conjunto básico de ocho intervenciones prenatales.
Aquellos países con el mayor número de muertes neonatales también tienen una baja cobertura de la atención postnatal para las madres. Etiopía (84.000 muertes; 7 por ciento de cobertura); Bangladesh (77.000, el 27 por ciento); Nigeria (262.000, el 38 por ciento); Kenia (40.000; 42 por ciento).
Los bebés que nacen de madres menores de 20 y mayores de 40 años tienen tasas de mortalidad más altas.
Fuente UNICEF: http://www.unicef.org/media/media_75893.html
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