El año pasado el fujimorismo obtuvo la mayoría absoluta en el Congreso, con 72 representantes, y con ello adquirió la posesión del poder de legislar inclusive sin necesidad de contar con el apoyo o el concurso de ninguna otra fuerza política. Tienen también, por cierto, el poder de controlar la labor del Poder Ejecutivo y amplias atribuciones de diversa índole, particularmente para nombrar a los altos funcionarios titulares de organismos autónomos del Estado. El fujimorismo tiene, pues, en sus manos un poder determinante sobre la vida de la nación y, por tanto, a partir de entonces, una clara responsabilidad sobre la situación que vivimos.
Artículo de Ronald Gamarra Herrera publicado en Hildebrandt en sus Trece el viernes 14 de julio de 2017.
Fuente Hildebrandt: http://hildebrandtensustrece.com/
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