
Washington,
D.C. – La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) publica hoy el
Informe sobre Corrupción y Derechos Humanos. El objeto central del informe es
presentar un análisis del fenómeno de la corrupción desde una perspectiva de
derechos humanos y a la luz de los estándares interamericanos.
En
este informe, la Comisión realiza un análisis de avances y desafíos, así como
de las iniciativas que permiten consolidar una estrategia a nivel regional y
nacional para hacer frente a la necesidad de combatir y erradicar el fenómeno
de la corrupción en el hemisferio. En ese sentido, a través de este informe, la
CIDH se propone dar cuenta del impacto multidimensional de la corrupción sobre
la democracia, el Estado de Derecho y, particularmente para el goce y ejercicio
de los derechos humanos en el continente.
El
punto de partida de este informe es la Resolución 1/18 que la Comisión emitiera
en marzo de 2018. En concordancia con dicha Resolución, el informe asume una
mirada amplia sobre la relación entre los derechos humanos y el fenómeno de la
corrupción que atraviesa la región.
La
Comisión publica este informe en el entendido de que la corrupción es un
complejo fenómeno que afecta el goce y ejercicio de los derechos humanos; que
debilita la gobernabilidad y las instituciones democráticas, fomenta la impunidad,
socava el Estado de Derecho y exacerba la desigualdad.
En
este informe sobre corrupción y derechos humanos, la CIDH se propone
desarrollar las distintas dimensiones en que el flagelo de la corrupción
impacta en el goce y ejercicio efectivo de los derechos humanos. También se
analizan los efectos de la corrupción en áreas temáticas de especial interés,
como la libertad de expresión y los DESCA; así como los grupos de especial
preocupación que se ven afectados por este fenómeno en sus derechos debido a la
situación de vulnerabilidad y discriminación histórica.
Para
enfrentar el flagelo de la corrupción, la CIDH destaca la importancia de
desarrollar e implementar, en los distintos niveles de gobierno, una serie de
políticas públicas que permitan consolidar una estrategia integral de lucha
contra la corrupción con enfoque de derechos humanos. El objetivo de estas
medidas es el fortalecimiento institucional, el control y la disminución de los
espacios de discrecionalidad, la rendición de cuentas y monitoreo sobre las
actividades públicas.
La
Presidenta de la CIDH, Comisionada Esmeralda Arosemena de Troitiño, destacó:
“Frente a la coyuntura regional que ha sido relevada por la CIDH a través de
sus distintos mecanismos, así como el impacto que el fenómeno genera sobre el
goce y ejercicio de los derechos humanos, este informe temático constituye una
herramienta que se espera sea de utilidad para el análisis y abordaje desde el
sistema interamericano de derechos humanos”.
Por
su parte el Secretario Ejecutivo de la Comisión, Paulo Abrão, indicó: “este
informe permite avanzar en la agenda anticorrupción con una mirada de derechos
humanos y proponer una hoja de ruta para el desarrollo de políticas públicas
con enfoque de derechos humanos para atender los efectos del flagelo de la
corrupción en el hemisferio”.
La
Comisión valora y agradece la información aportada tanto por los Estados como
por las organizaciones de la sociedad civil, personas particulares y académicos
a través de las respuestas al cuestionario, así como los comentarios y
sugerencias de los expertos y expertas internacionales. Estos insumos
constituyeron un invaluable aporte para la elaboración del Informe que hoy
publica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario