Hace 25 años, un 20 de noviembre de 1989, las Naciones Unidas adoptó la Convención sobre los Derechos del Niño, que además de ser un tratado internacional vinculante, es una promesa para brindar un mundo mejor a todos los niños y niñas. Desde esa fecha, innumerables avances se han dado a nivel global en relación a los derechos de los niños, niñas y adolescentes. Los dos más importantes razones para seguir convocando a la Convención como un instrumento de afirmación de derechos de la niñez es el reconocimiento e los niños y niñas como sujetos de derechos, que deben ser escuchados y sus puntos de vista tomados en cuenta por los adultos.
La supervivencia y el desarrollo son un principio de la Convención y suficiente razón para asegurar una vida plena a los niños. La mortalidad infantil ha disminuido a nivel global, sin embargo, cada día mueren 22,000 niños por causas prevenibles. Esta situación todavía da escalofríos. En 1990 se estimaba en 90 muertes por cada 1000 nacidos vivos. Hoy, el objetivo es reducir la mortalidad a nivel mundial de 57 cada 1000 nacidos vivos a 20 cada 1000 para 2035.
Estos estimados globales esconden disparidades a nivel regional. Un estudio del Banco Mundial lo titula así: América Latina, enemigo mortal de madres y niños es acceso desigual en la salud. Esta misma entidad señala que si bien la mortalidad infantil se redujo en más de la mitad en los últimos años, los niños de hogares de bajos ingresos tienen cinco veces más probabilidades de morir antes de su quinto año de vida, por causas que podrían evitarse.
Según, la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar (Endes) Perú-2012, la desnutrición infantil se ha reducido a 18.1%. Pero, algunas regiones del Perú tienen cifras por encima del 30% estimados similares a algunas regiones de África. El Banco Mundial ha señalado que el Perú ha podido avanzar más en la lucha contra la desnutrición, lamentablemente, la inversión en salud es muy baja.
"Queda prohibido reír mientras un niño carezca de sustento y sea su silueta apenas el guiñapo de una sombra" reza un verso del poeta peruano Arturo Corcuera. ¿Podemos sonreír tranquilos cuando la desnutrición infantil afecta a casi 9 millones de niños y niñas en América Latina?
El Estudio Mundial de Violencia contra la Niñez adoptado por las Naciones Unidas en el 2006 fue un paso importante para comprender la magnitud de la violencia que tiene como víctimas a miles de niños y niñas. Su mensaje central fue: "ninguna forma de violencia contra los niños es justificable y de toda violencia es prevenible. No puede haber más excusas".
42 países prohíben el castigo físico y humillante en todos los espacios de la vida social de niños y niñas; 7 en América Latina; Perú, todavía. Los niños son el único sujeto con derechos que puede ser golpeado y maltratado impunemente por leyes que lo permiten y el único, también, que tiene que argumentar el daño y perjuicio que le produce el castigo físico y la humillación en u presente y futuro.
La violencia sexual contra las niñas y niños está tan extendida que las madres han empezado a organizarse en diversos países para denunciar a violadores y jueces que liberan a los responsables. En Perú más del 70% de las víctimas de violación son niñas.
Una reciente consulta a niños, niñas y adolescentes sobre inversión en infancia en América Latina y en Perú, realizada por Save the Children concluyó que la justicia, educación, salud, protección, respeto por la diversidad y la no discriminación y la participación de la niñez son prioridades que todos los gobiernos deben tomar en cuenta. Justicia porque en varios países de la región cada día se matan y violentan a niños y adolescentes sin que a nadie le importe. Los responsables no son investigados ni castigados. El acceso a una educación de calidad, según sus propias palabras, es una posibilidad para salir de la pobreza y ser un mejor ciudadano y ciudadana. Los chicos imaginan un futuro mejor y quieren un mundo del tamaño de sus sueños. Tenemos 25 razones para seguir apostando por hacer realidad sus sueños.
Artículo de Teresa Carpio publicado en Ideele, el jueves 20 de noviembre de 2014.
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